viernes, febrero 22, 2013

Sunset and Sunshine in my mind



En mi último viaje al sur de Chile, a partir de una serie de circunstancias, se provocó un viaje a mi pasado lejano más allá de los últimos diez años. Esto partió en un recorrido a sectores ya visitados y se comenzó a  materializar cuando reconocí a una persona con quien hablé algunas veces, pero que no recuerdo su nombre, ni suficientes elementos que permitieran reconstruir esas conversaciones; tengo pasajes vagos de que usaba un morral negro, un encuentro en una fiesta callejera y el comentario sobre mi actitud deportiva de la época, todos insuficientes para rearmar el pasado e intentar decir al menos un hola.

Luego en un pueblo, se me evocó también ese pasado remoto. Yo estuve en ese mismo lugar hace muchos años, de eso me fui dando cuenta en forma paulatina, por el tipo de habitaciones, los colores, el baño y la estructura de madera de la residencial donde dormí. Tan enterrado está ese pasado para mi?... si no fuera porque la dueña no ha hecho prácticamente ninguna modificación a la casa, probablemente no me hubiese dado cuenta.

Tengo esas imágenes tan aisladas y desarticuladas, que me recordaron la película “Eterno resplandor de una mente sin recuerdos” de Michel Gondry, donde era posible eliminar a personas de la mente, borrándolas selectivamente de todos los recuerdos compartidos. En Internet encontré algunas fechas de eventos, que me permitieron situar algunos hechos dentro de un calendario, pero en general son sólo destellos y mi presencia solitaria en ellos, tal como en la película.

En cada noche tuve sueños que recordé a la mañana siguiente, los primeros tres días fueron con personas importantes para mi que están muertas, pero que volvieron a mi mente en nuevos diálogos siempre agradables. Luego destellos de lugares donde estuve alguna vez. En esa actualización de los paisajes ya conocidos, me di cuenta de lo lejano y diferente que se ve el pasado y si bien hay libertad en tener una mente sin recuerdos, también esto genera vacíos importantes a los cuales estar atento. Quizás deba replantearme esa actitud de conocer fundamentalmente lugares nuevos, porque en los recuerdos hay un misterio que de alguna forma creo que algo tienen que decirme para el hoy.